Retrasos administrativos de Segalmex afectan a más de mil productores en Durango
Adeudo de 200 millones de pesos y una cosecha limitada intensifican la crisis en el sector agrícola del estado.
Por un retraso administrativo, Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) adeudaba cerca de 200 millones de pesos a más de mil 100 productores de frijol en Durango. Estas 800 toneladas de frijol, acopiadas en bodegas desde el 19 de noviembre, representan un recurso vital que dejó de circular durante casi un mes, informó Jesús López Morales, titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (SAGDR).
“El productor siente que esto es un castigo”, expresó López Morales, subrayando la urgencia de que los pagos se liberaran. Tras gestiones entre el gobernador del estado, Esteban Villegas Villarreal, y el secretario de Agricultura federal, Julio Berdegué Sacristán, se logró iniciar la generación de órdenes de pago para los productores que habían entregado su cosecha.
El precio de garantía del frijol es de 27 pesos por kilogramo, lo que equivale a 6 mil pesos por tonelada, incluyendo un monto adicional de 160 pesos por concepto de traslado. Sin embargo, la falta de liquidez provocó que muchos agricultores recurrieran a créditos para sostener sus actividades. “Los intereses no se detienen, cada día que pasa representa más pérdidas para ellos”, advirtió el funcionario estatal.
El panorama se complica aún más por las condiciones climáticas adversas de este ciclo agrícola. De las 120 mil hectáreas que se suelen sembrar en el estado, solo 35 mil lograron cosecharse, lo que representa apenas el 29.17 por ciento de lo habitual.
López Morales llamó a los productores a evitar vender su producto a intermediarios, conocidos como “coyotes”, quienes ofrecen solo 19 pesos por kilogramo, muy por debajo del precio de garantía establecido. Asimismo, aseguró que el gobierno estatal se mantendrá vigilante para garantizar que los pagos lleguen en tiempo y forma, disipando los temores de más retrasos.
“Actualmente ya se cuenta con el recurso para emitir los pagos de inmediato”, afirmó. Sin embargo, reconoció que la falta de un registro oficial de productores en Durango complica la logística, ya que muchos alternan sus cultivos anualmente.
La situación evidencia la fragilidad del sector agrícola en Durango, dependiente no sólo de condiciones climáticas favorables, sino también de una administración eficiente de los recursos públicos. Mientras los pagos comienzan a regularizarse, el llamado a la acción es claro, fortalecer los sistemas de apoyo para evitar que episodios como este se repitan.