Fractura en tejido social, origen de la violencia en CD. Juárez: Gustavo de la Rosa

Quien se desempeñó como director del Centro de Readaptación Social en Ciudad Juárez (1995-1998)

Fractura en tejido social, origen de la violencia en CD. Juárez: Gustavo de la Rosa

Con la declaración de guerra durante el gobierno de Felipe Calderón al Cártel de Juárez, aunado a la desintegración familiar, la pobreza y la falta de oportunidades, Ciudad Juárez, Chihuahua se convirtió en una de las más violentas del país, resaltó Gustavo de la Rosa Hickerson, defensor de Derechos Humanos en la localidad, en entrevista para Canal 6TV.

En esta terrible lucha que bajó de intensidad en 2013, pero volvió con fuerza en 2017 y continúa, se tiene un registro promedio de mil homicidios anuales, la mayoría de ellos cometidos contra jóvenes de 18 a 29 años, aunque también contra menores edad. Como antesala, se sabe que por 30 años los salarios en Ciudad Juárez permanecieron congelados en siete dólares (aproximadamente 139.39 pesos), situación que orilló a ambos padres a salir de trabajar, dejando solos a niños y jóvenes; lo que a su vez propició que alrededor de 30 mil menores de edad dejaran la secundaria y comenzaran a incurrir en la vagancia y a cometer sus primeros delitos.

En este contexto, De la Rosa Hickerson, quien se desempeñó como director del Centro de Readaptación Social en Ciudad Juárez (1995-1998), reveló que más del 90% de los internos que obtenían sentencia condenatoria se encontraban en el grupo de jóvenes que desertaron de secundaria.

Agregó que en su tiempo a cargo del CERESO se percató de la necesidad de extirpar la corrupción de los directores, de los custodios y de las autoridades carcelarias; así como de visualizar a los reclusos como lo que son, seres humanos con el derecho a recibir una segunda oportunidad de cambiar de vida.

Finalmente, el también diputado estatal por el Distrito VII denunció que se ha detectado en Ciudad Juárez la operación de traficantes de personas conocidos como ´coyotes o lobos´, quienes trasladan a los migrantes a la frontera, los encierran en casas y se ponen en contacto con sus familiares en Estados Unidos para exigir dinero a cambio de no herirlos; problemática que está creciendo sin que las autoridades tomen acciones.