Improvisado decreto de AMLO sobre maíz transgénico, pone en riesgo relación con EE.UU.

Improvisado decreto de AMLO sobre maíz transgénico, pone en riesgo relación con EE.UU.

El uso del hervicida glifosato en México comenzó en 1977 con la finalidad de eliminar las ‘malas yerbas’ antes de la siembra, facilitando así la producción masiva y en menor tiempo que con los métodos tradicionales, sin embargo, en 2015, la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó al agrotóxico como probable cancerígeno, lo que derivó más tarde en la busqueda del gobierno mexicano por prohibirlo, pese a no contar con la suficiente evidencia científica propia que respalde su decisión.

Ante el segundo decreto impulsado por la administración de Andrés Manuel López Obrador por el que se prohibe la importación, uso y distribución del glifosato y el maíz transgénico en México, aprobado el pasado 13 de febrero, y que ha causado gran controversia con el gobierno de Estados Unidos; el programa Lo Marginal en el Centro de Canal 6Tv realizó un panel de discución entre tres especialistas para dar un transfondo a esta medida.

Por su parte, Ana Gutiérrez, coordinadora de Comercio Exterior y Mercado Laboral en el IMCO recordó que dicho decreto establece como fecha límite para el uso de Glifosato y el maíz trangénico, enero de 2024; no obstante, la medida no solo es ambigua, pues limita el consumo humano, pero permite el animal hasta que se encuentre una alternativa, sino que también implica un cambio de 306 grados al no contar con los estudios pertienentes ni la preparación del sector agroindustrial. 

Asimismo, la especialista en finanzas recalcó que esta decisición abre la puerta a que Estados Unidos pida un proceso de solucion de controversias e incluso se lleve el tema a un panel de investigación para evaluar si este decreto viola el T-MEC, pues en efecto, infringe dos capitulos al menos: “el de Trato Nacional y el de Acceso al Mercado, porque establece que no se pueden imponer barreras albitrarias a la exportacion o importacion, mucho menos sin sustento cientifico”.

En tanto, Juan Carlos Anaya, director del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas y exmiembro de Operaciones en CONASUPO, destacó que el consumo nacional de maíz es de 45.5 millones de toneladas, cuando solo se producen 27 millones, lo que contradice el discurso gubernamental de un acercamiento a la autosuficiencia de este grano.

“Ningún país en el mundo es autosuficiente en todo, (…) nuestro gran talón de Aquiles, son los granos”, refirió; al tiempo que indica que, en granos y alojinosas la producción en México es de apenas el 52%, cuando debería de ser de por lo menos 75%, lo que nos coloca en una situación vulnerable.

Aunado a ello, Juan Anaya resaltó que, de momento, México no cuenta con los estudios tecnicos que avalen que el glifosato verdaderamente es dañino, situación que ha sido recriminada por el gobierno estadounidense. A su vez apuntó que el glifosato ayuda a aumentar la productividad y disminuir costos, añadió que, en primavera, la disminucion del glifosato podria provocar la perdida de 700 mil toneladas de maiz.

“Nunca le han preguntado a los productores si están de acuerdo o no; son decisiones de los que no producen”, expuso.

En este contexto, el maestro en Economía por la UNAM, Jorge López manifestó que el gobierno mexicano no hace nada para lograr la soberania en materia de producción de maíz, “no se invierte en ciencia, capacitación a los productores, inversion al sector productivo, infraestructura y creditos”, y destacó que “se necesita una segunda revolución en el campo” que ayude a incrementar la producticidad; pues con este decreto “pareciera que el gobierno de la 4T quiere volver al pasado, sin atender el mundo actual”.