Admite SCJN recursos de la oposición para frenar traspaso del Tren Maya al Ejército

Admite SCJN recursos de la oposición para frenar traspaso del Tren Maya al Ejército

La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), aceptó a trámite las dos primeras acciones de inconstitucionalidad presentadas por la oposición en contra del traspaso del Tren Maya a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el cual fue aprobado por la mayoría de Morena y sus aliados en el llamado “viernes negro”. Los recursos fueron turnados al ministro Alberto Pérez Dayán, quien al considerar que se presentaron en tiempo y forma dio 15 días a los legisladores y a la Oficina de la Presidencia para que rindan los informes correspondientes a este asunto.

Fue el propio ministro Pérez Dayán, quien el 1 de marzo aceptó a trámite controversias constitucionales en contra del llamado Plan B electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador, el cual finalmente fue invalidado por la mayoría del Pleno de la SCJN, cuando fue discutido. Ahora, las acciones de inconstitucionalidad admitidas fueron interpuestas por 243 diputados y senadores en contra del decreto publicado el pasado 3 de mayo en el cual se reformó el artículo 3 de la Ley de Vías Generales Reglamentaria del Servicio Ferroviario y el artículo 59 Bis de la Ley Federal de la Entidades Paraestatales.

Dichos artículos, permiten que las Fuerzas Armadas tomen el control de proyectos ferroviarios como el Tren Maya, lo cual de hecho sucedió el 31 de mayo cuando la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), entregó el título de asignación del proyecto a la Sedena. Con ese documento, el Ejército puede construir, operar y explotar la vía general de comunicación ferroviaria del Tren Maya, además tendrá la facultad de ofrecer la prestación del servicio público de transporte ferroviario de carga y de pasajeros, así como otorgar permisos para prestar los servicios auxiliares requeridos.

En sus recursos, los legisladores de oposición reclaman que Morena y sus aliados violaron la legalidad del último día de sesiones ordinarias del Senado de la República. En ese día, llamado “viernes negro”, ante la imposibilidad de sesionar en el recinto habitual, los morenistas llevaron la discusión al patio de la Vieja Casona de Xicoténcatl.