Trasladan Guardia Nacional al Metro y dejan en desamparo a 29 estados

El mensaje es claro. El Metro de la Ciudad de México no necesita más vigilancia; los ‘accidentes’ recientes son muestra de la falta de mantenimiento y renovación que por años ha acarreado este sistema de transporte utilizado diariamente por alrededor de 4.6 millones de pasajeros.

Por ello, la presencia de 6 mil 60 elementos de la Guardia Nacional en el Sistema de Transporte Colectivo (STC) para atender los supuestos “incidentes fuera de lo normal”, solo representan una ‘patada de ahogado’ de las autoridades para evitar lo inevitable ante el descuido en que han dejado el Metro.

No solamente la Guardia Nacional brindará vigilancia, sino que, actualmente, 5 mil 853 agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana capitalina (SSC-CDMX) vigilan las 190 estaciones del Metro. Cifra que resulta descomunal si se compara con la presencia de los efectivos en estados sumidos en la violencia como Michoacán, con 4 mil 640; Jalisco (4 mil 500), Veracruz (4 mil 45); Sinaloa (3 mil 989) y Chihuahua (3 mil 090).

Únicamente, en el Estado de México, la Ciudad de México y Guanajuato existen más guardias nacionales que los que tendrá el STC.

Es así como 29 entidades del país permanecerán en el desamparo ante el retiro de elementos de la Guardia Nacional para cumplir con el capricho de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, que ve en las recientes tragedias ocurridas en el Metro un posible intento se sabotaje para su candidatura presidencial.

En este contexto, el representante sindical del Metro, Fernando Espino acusó la falta de mantenimiento a las instalaciones y a los trenes; destacando que eventos como el estallido de neumáticos, reflejan la falta de recursos.

“No tenemos ni herramienta, mis compañeros tienen que cooperarse para comprar sus propias herramientas”, recalcó.

Por su parte, Amnistía Internacional rechazó la presencia de dichos elementos en el transporte, catalogándola como una operación militar. Asimismo, una gran parte de los usuarios del Metro muestran su preocupación ante las constantes fallas.

“¿Con qué seguridad les digo a mis hijos que sí voy a llegar bien a mi casa?”, recriminó la usuaria María de Jesús Romero.