Nicaragua marcha hacia el progreso
Nicaragua es un país pequeño, por población (6.7 millones), y por territorio: 130 mil km²; pero grande por sus proezas. Ha sido históricamente sometido por las potencias, por España primero, y luego por Estados Unidos, que la invadió y ocupó desde 1912 hasta 1933, aunque encontró tenaz resistencia en el ejército popular encabezado por Augusto César Sandino. Él fue asesinado en 1934, y Nicaragua quedó bajo dominio norteamericano, a través de gobiernos títeres, principalmente la dinastía Somoza, desde 1936. Esto terminó al triunfar la revolución de 1979, encabezada por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), uno de cuyos principales líderes era el actual presidente Daniel Ortega Saavedra. Aun con todos sus avatares, es esta una auténtica revolución, profundamente popular y de hondas raíces históricas.
Después, sometido a las reglas del juego democrático capitalista, el FSLN perdió las elecciones frente a políticos conservadores, patrocinados por EE. UU., y que llevaban como candidata presidencial a Violeta Chamorro. El Frente Sandinista quedó fuera del gobierno entre 1990 y 2006, período en que imperaron el neoliberalismo y el retroceso social. En 2007 triunfaron nuevamente los sandinistas, en elecciones, con el actual presidente, Daniel Ortega, como candidato. En posteriores procesos, el voto popular lo ha sostenido y da legitimidad a su gobierno.
Estos antecedentes permiten entender la campaña mediática, sospechosamente unánime, orquestada por Estados Unidos, que invariablemente tilda al presidente como “dictador”. A propósito, ¿por qué nunca llaman dictadores a los presidentes de Estados Unidos, que invaden países y violan sistemáticamente los derechos humanos dentro y fuera de su territorio? ¿Por qué no a Emmanuel Macron, que apalea a placer al pueblo francés? Ellos son “demócratas” respetables.
El sandinismo ha alcanzado éxitos económicos y sociales que, vistos con cuidado, revisten gran relevancia. Nicaragua, como toda nación libre, sufre sanciones económicas de EE. UU.; sin embargo, su economía crece. Redujo sus niveles de deuda pública como porcentaje del PIB, registra superávit fiscal: la recaudación creció el año pasado en 17.6%. La tasa de desempleo es de 2.6%. Las exportaciones interanuales aumentaron en 12.6%, y la inversión extranjera directa, en 25.3% (Banco Central Nicaragüense, Infobae, 3 de abril de 2023).
Según el Banco Mundial: “La crisis sociopolítica de 2018-2019, seguida de la pandemia y dos grandes huracanes en 2020, provocó una pérdida acumulada del PIB de 8.7% […] la pobreza aumentó hasta el 16% […] El impacto económico de la pandemia fue limitado debido a medidas de contención moderadas y fuertes entradas de remesas […] La inversión pública a gran escala, la asistencia financiera externa y la fuerte demanda de exportaciones ayudaron a Nicaragua a recuperarse de los impactos de estos múltiples choques. El PIB real se recuperó en un 10.3% en 2021, a los niveles anteriores a 2018. […] A pesar de la alta inflación, los vientos en contra a nivel mundial y los daños causados por el huracán Julia, se estima que el PIB real creció un 4.0% en 2022 [...] impulsado por un consumo privado robusto debido al incremento de las remesas, así como por las exportaciones […] Las remesas se expandieron considerablemente durante 2022, alcanzando alrededor del 22% del PIB […] a pesar del débil crecimiento del empleo y la alta inflación, se estima que la pobreza se redujo al 13.3% en 2022 desde el 14.2% en 2021. En 2022, la inflación anual promedio aumentó al 10.5% […] Se proyecta que el crecimiento se modere al 3% en 2023 […] El Banco Mundial ha apoyado medidas de reducción de la pobreza en Nicaragua […] Para llegar mejor a las familias vulnerables, los proyectos de la AIF aprovechan las iniciativas locales que amplían los recursos limitados y brindan resultados sostenibles (Banco Mundial, 4 de abril de 2023).
Crítico del sandinismo, el medio alemán DW reconoce: “Pese a este escenario desalentador, a una deuda pública externa de 15 mil millones de dólares y a las sanciones internacionales impuestas, un informe del Banco Mundial da cuenta de un repunte de la economía…”. Y admite que Estados Unidos: “… ha sancionado una gran parte de los productos …”. Telesur confirma que: “Nicaragua ha venido creciendo a un promedio anual en los últimos 10 años de 5 puntos porcentuales del PIB” (Telesurtv, 19 julio de 2021)
Y mejora el bienestar social. Telesurtv detalla: “Los logros de la Revolución Sandinista […] se reflejan en la disminución de la pobreza, la ampliación de la red eléctrica nacional y el incremento de la seguridad hasta ocupar el primer puesto en Centroamérica […] En salud, Nicaragua ha incrementado su red hospitalaria en diferentes rubros como centros de atención médica general, casas maternas, casas para personas con necesidades especiales […] en los últimos 12 años se han construido 18 hospitales, dos hospitales nacionales, un hospital departamental y 13 hospitales primarios […] la mortalidad materna se redujo en 59% [entre 2006 y 2018]. Y la mortalidad infantil se redujo en 58%. Desde la llegada al poder del FSLN en 1979, se declaró la salud gratuita para todo el pueblo […] cambió el modelo de atención, que se tradujo en la eliminación de la poliomielitis en 1982, y se controlaron enfermedades como la tosferina y el sarampión” (Telesurtv, 19 julio de 2021).
Sobre política social: “La pobreza en general estaba en un 48%, el Gobierno Sandinista la había reducido hasta el 24%, mientras la pobreza extrema se redujo de 20% al 6.3. Durante la gestión del gobierno del presidente Daniel Ortega, desde 2007, se ha duplicado el salario mínimo. La inversión extranjera directa pasó de 256 millones de dólares a 1,500 millones y hay que mencionar que Nicaragua no contribuye al éxodo que tienen los países del triángulo norte hacia los Estados Unidos” (Ibid.).
En educación: “La Cruzada Nacional de Alfabetización […] permitió reducir el índice de analfabetismo, superior al 50% hasta un 12, cuyo logro obtuvo el reconocimiento de la Unesco en 1981. En cambio, en 2007 en la segunda etapa de la revolución con el Frente Sandinista en el Gobierno, el primer decreto que emite el presidente comandante Daniel Ortega es restituir el derecho a la educación pública gratuita y de calidad […] nueva política salarial para incentivar a los maestros que tenían un salario equivalente a 80 dólares al mes […] programas sociales como la merienda escolar, el programa Amor para los más Chiquitos, la mochila escolar, el bono a los bachilleres, la secundaria rural…” (TelesurTV, 19 julio 2021).
Sobre logros sociales, dice Prensa Latina: “El diputado de la Asamblea Nacional de Nicaragua, Carlos Emilio López afirmó que la Revolución sandinista trajo estabilidad […] 16 años de sandinismo han significado para el pueblo, luz, desarrollo humano, seguridad y soberanía alimentaria, inclusión social, rectoría del Estado de políticas públicas, respeto y restitución a los derechos individuales y colectivos […] ha aumentado en más de un cien por ciento la cantidad de kilómetros de carreteras a nivel nacional […] y hasta 99.2% la cobertura eléctrica […] incremento acelerado de la cobertura y la calidad del agua potable y la red de alcantarillado sanitario a nivel nacional […] [en] los gobiernos neoliberales, solo existía pobreza, hambre, exclusión social, privatización de los servicios básicos, y violación masiva y sistemática de los derechos individuales y colectivos. Ahora-dijo-existe mejoramiento y ampliación de la infraestructura social, económica y municipal, ampliación de la inversión pública en salud, educación, seguridad alimentaria, masificación del crédito para las mujeres [y] sectores populares y emprendedores” (Prensa Latina, 11 de enero de 2023).
Y el pueblo reconoce la gestión del presidente. “De acuerdo con los resultados del sistema de monitoreo de opinión pública, presentado por la empresa M&R Consultores, el 85.3% de los nicaragüenses califica positivamente su capacidad de gestión. […] el 88.8% de los consultados se expresaron a favor de la educación pública, carreteras (88.1), salud pública (86, transporte y energía eléctrica (86.1) […] 77.6 señaló [que] el jefe de Estado trabaja por los intereses de la población en general […] 75.8% consideran que hay más seguridad [que] hace cinco años […] 81.6% reconoce el grado de profesionalismo de la institución policial” (Telesur, 14 de julio de 2022).
Así pues, a juzgar por los resultados, el sandinismo muestra logros significativos en economía y bienestar social, y aplica una política soberana. He ahí la razón de la hostilidad de Estados Unidos, Europa, gobiernos satélites y la derecha nicaragüense. De esto hablaremos después.
Texcoco, México, a 10 de mayo de 2023
Abel Pérez Zamorano es Doctor en Desarrollo Económico por la London School of Economics/ Profesor - Investigador en la Universidad Autónoma Chapingo.
Síguelo en Twitter como @aperezzamorano