Continúan preparativos para encuentro Trump-Putin; Moscú no descarta provocaciones de Ucrania

El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y el canciller de Rusia, Serguéi Lavrov, reafirmaron este martes durante una conversación telefónica su compromiso para garantizar el éxito de la próxima cumbre entre los presidentes Donald Trump y Vladimir Putin, pactada para el próximo viernes en Alaska. Sin embargo, el Ministerio de Defensa, no descartó que Ucrania prepare provocaciones para socavar las conversaciones del próximo 15 de agosto.
"Puedo confirmarles que el secretario Marco Rubio habló con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, y (abordaron) los preparativos para la próxima cumbre entre el presidente Donald Trump y el presidente ruso, Vladímir Putin. Ambas partes confirmaron su compromiso para que el evento sea un éxito", declaró la portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce.
Trump viajará este viernes a la ciudad de Anchorage, en Alaska, donde recibirá a Putin.
El objetivo del presidente estadounidense es tener una mejor idea de cómo poner fin al conflicto en Ucrania, adelantó la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
Para Trump la reunión será un "ejercicio de escucha", dado que una sola de las partes involucradas en el conflicto estará presente, agregó.
"Según la información disponible recibida a través de diversos canales, el régimen de Kiev está preparando una provocación para interrumpir las conversaciones ruso-estadounidenses programadas para el 15 de agosto de este año", señala el comunicado del ente castrense sobre posibles provocaciones de Kiev.
Para este objetivo, el lunes 11 de agosto Ucrania llevó a periodistas extranjeros a la ciudad de Chujúyiv, en la provincia de Járkov, bajo el pretexto de "preparar una serie de reportajes sobre los residentes de la ciudad en la zona del frente", precisó.
Según el ministerio, Kiev planea lanzar un ataque con drones y misiles inmediatamente antes de la cumbre del próximo viernes contra una zona residencial densamente poblada o contra un hospital, con un gran número de víctimas civiles, lo que sería inmediatamente "atestiguado" por los periodistas occidentales llevados a la zona.
Además, el Ministerio de Defensa ruso no descarta que Ucrania pueda ejecutar provocaciones similares en otras zonas bajo su control.
Como resultado de la provocación de Kiev, toda la responsabilidad por el ataque y las víctimas entre los civiles será atribuida a las Fuerzas Armadas de Rusia con el objetivo de "crear un contexto mediático negativo y condiciones para socavar la cooperación ruso-estadounidense en el arreglo del conflicto en Ucrania", señaló el ente.
Rusia continúa desde el 24 de febrero de 2022 una operación militar especial en Ucrania, cuyos objetivos, según el presidente Vladímir Putin, son proteger a la población de "un genocidio por parte del régimen de Kiev" y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) hacia el este.
El presidente de EEUU espera que luego de reunirse con Putin se realice una cumbre trilateral de la que también participe el líder ucraniano, Vladímir Zelenski, dijo Leavitt.
Desde Washington no descartan que Trump pueda viajar en un futuro a Rusia.