Pobladores de Chimalhuacán marchan para exigir la renuncia de Xóchitl Flores
En el municipio de Chimalhuacán, gobernado por Morena, el subdesarrollo está a flote, pues las coladeras abiertas, hoyos, baches y basura por doquier se suman a la falta de agua, la inseguridad galopante y las arbitrariedades de sus gobernantes, la alcaldesa Xóchitl Flores Jiménez y su marido Miguel Benito Pérez, quienes en nueve meses de “trabajo” se han dedicado a “vengarse” de sus oponentes y a usufructuar el erario de los chimalhuaquenses, ya que han despedido a más de mil trabajadores y, colocado a sus parientes en la nómina y no hay una sola obra de beneficio a la población.
Lo anterior fue denunciado durante una marcha de 1,500 nativos por calles de la localidad. . La movilización, encabezada por locatarios, comerciantes, taxistas, ejidatarios, tlateleros y defensores del agua, entre otros grupos, comenzó en el kiosko de San Agustín y avanzó por el casco viejo hasta llegar al jardín principal, frente a la presidencia, donde se realizó un mitin para informar al pueblo que los postulados de “no mentir, no robar y no traicionar” son letra muerta en este gobierno, ya que la alcaldesa -dijeron- está empeñada en derribar el mercado histórico Ignacio Zaragoza -ubicado junto a la presidencia-, y tirar árboles vetustos, además de violentar las leyes laborales y excederse en la vieja práctica del nepotismo.
Con gritos de “¡Xóchitl, entiende, el pueblo no te quiere!” y “¡Benito, borracho, tu lugar es el anexo!”, los activistas marcharon cinco kilómetros junto a sus líderes, entre ellos Fernando González Bolaños, Silvestre López Cornejo, Noé Hernández Buendía, Martín Zepeda Hernández, Verónica Valencia, Guadalupe Aparicio, Cruz Buendía y Gabriel González.
Luego, en el templete instalado frente a la presidencia, ante la mirada vigilante de los enviados de la alcaldesa, los dirigentes externaron que el pueblo está cansado de malos gobernantes y pésimos cabildos, dedicados exclusivamente a enriquecerse a costa del presupuesto.
Ahí, uno tras otro, los oradores fustigaron la “incapacidad” de la titular del ayuntamiento para mejorar las condiciones de vida de los habitantes, ante un panorama de inseguridad, inundaciones, falta de agua y abusos sin límite, señalando que no permitirán que se derribe el mercado Zaragoza y dejen sin sustento a decenas de familias.
Martín Zepeda, diputado local, advirtió que presentó una moción en la Cámara Baja para defender a los comerciantes y estará atento, junto con su partido (Movimiento Ciudadano) para impedir que progresen las amenazas de la Ejecutiva local.
Los activistas anunciaron que continuarán las movilizaciones para impedir que Morena y sus representantes acaben con la paz y la seguridad de la población.