México necesita despolitizar el tema del agua para resolver el desabasto: COPARMEX
La Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) ha resaltado la urgente necesidad de despolitizar el tema del agua en México para abordar de manera efectiva los problemas de desabasto que afectan a diversas regiones del país. Jorge Ramírez Hernández, vicepresidente de sustentabilidad de COPARMEX, destacó que la reciente escasez de agua en ciudades como Monterrey y Ciudad de México se debe principalmente a una falta de planeación en la distribución y a un crecimiento urbano desordenado.
Ramírez Hernández, subrayó que la actual Ley de Aguas Nacionales no estimula el ahorro, lo que requiere su modificación para que realmente promueva una gestión eficiente del recurso. "La ley debe convertirse en un verdadero instrumento de ahorro," afirmó. En este sentido, insistió en que se debe dejar de lado la politización del agua y enfocarse en aspectos técnicos para desarrollar una visión a largo plazo que permita encontrar soluciones duraderas.
El especialista señaló que el agua es esencial tanto para la subsistencia como para el desarrollo del país, pero lamentó que no ha tenido el impacto político y económico necesario. Además, mencionó la falta de infraestructura adecuada y la carencia de políticas públicas efectivas como factores que contribuyen al problema del desabasto.
También, advirtió sobre la creciente tensión entre estados y ciudades debido a la competencia por los recursos hídricos, subrayando que los ríos y acuíferos son elementos compartidos que trascienden fronteras. Resaltó que, aunque existen soluciones viables, la complejidad radica en los aspectos políticos y económicos, por lo que es esencial la cooperación entre el gobierno y la sociedad.
El vicepresidente de sustentabilidad de COPARMEX indicó que, si bien hay fuentes de financiamiento y posibilidades de implementar soluciones, es crucial que todos los ciudadanos participen en el proceso. Señaló que en municipios como Durango, el 24 por ciento de los usuarios no paga por el agua que recibe, y existen conexiones clandestinas que extraen grandes cantidades de agua sin ningún costo.
Finalmente, Ramírez Hernández hizo un llamado a la población para que se involucre en la resolución de este problema, enfatizando que, aunque algunos estados tienen una cultura del agua más arraigada que otros, todos deben contribuir a la solución. "Tenemos grandísimos retos," concluyó, destacando que el sureste del país, con abundante agua y baja población, no enfrenta los mismos problemas que el norte y el Bajío, donde la escasez es una preocupación crítica.