La Batalla de Lepanto y la Virgen de Guadalupe
“La más alta ocasión que vieron los siglos”, Miguel de Cervantes Saavedra
Fue el 7 de octubre de 1571 que tuvo lugar la mayor batalla naval de nuestra historia moderna, o como Miguel de Cervantes Saavedra la describió a la Batalla de Lepanto, “la más alta ocasión que vieron los siglos”.
En dicha batalla, donde estuvieron enfrentados otomanos y cristianos, miembros de la Santa Liga conformados por las tropas de España, Venecia y del Papa San Pío V, en el Golfo de Corinto con el fin de defender tierras cristianas; es que una copia de la representación de la Virgen de Guadalupe estuvo presente.
La llamada Batalla de Lepanto, fue consecuencia de los últimos intentos de los musulmanes de volver a conquistar parte de Europa, esta vez entrando por Italia, luego de que los españoles fin al reino nazarí de Granada en 1492, cuando Muhámmad XII fue derrocado por los reyes católicos y se vio orillado a entregar las llaves de la ciudad.
Dicha copia de la virgen había sido obsequiada a Juan de Austria, por su medio hermano el rey Felipe II, quien comandó la flota de la Liga Santa, la cual estaba compuesta por 227 galeras, 76 fragatas y 6 galeazas; a su vez, Juan obsequió el estandarte de la Virgen de Guadalupe a Andrea Doria, quien la colocó en la capilla de su galera.
Doria lideró el flanco derecho de la línea de la Liga Santa durante la Batalla de Lepanto; de acuerdo con fuentes históricas, Andrea Doria y sus capitanes rezaron a la Virgen de Guadalupe, para obtener la victoria sobre los turcos y expulsar así a los infieles musulmanes de Europa.
Al ganar la batalla, la imagen de la Virgen de Guadalupe fue considerada milagrosa, por lo que actualmente esta representación se encuentra en el templo de San Estaban de Abeto, cerca de Génova.
Este templo es muy visitado por los devotos genoveses que consideran que esta representación de la virgen es muy milagrosa.