Inflación afecta a las familias que menos tienen en el norte de Quintana Roo

Cancún, Quintana Roo. - Por las malas políticas del gobierno federal hoy los ciudadanos de México enfrentan un bajo poder adquisitivo, cada vez su dinero vale menos y por ende no pueden adquirir los productos básicos para su adecuada sobrevivencia por el incontrolable aumento en los precios de los insumos para la producción, aseguró la señora Anita Luría Hernández, del fraccionamiento Rivera ubicada en la ciudad de Cancún.

Pero, además, las mismas empresas enfrentan problemas por la inflación, no solo por las bajas ventas derivadas del bajo poder adquisitivo de los consumidores, sino por el aumento en los precios de los insumos para la producción, lo que al final de cuentas los orilla a no pagar salarios dignos a sus empleados.

“Es un círculo vicioso –expresó--, porque por los altos precios de los productos de la canasta básica los ciudadanos, que al final de cuentas son empleados, no pueden comprar lo necesario para una digna vida y alimentación, no hay las ventas suficiente y eso orilla que los patrones paguen bajos salarios, y ahora salen con la intención de querer reducir las horas laborales, dar más vacaciones y lo que va a ocurrir es que pudiera haber trabajo pero serán mal pagados y no se darán las  prestaciones sociales”.

La inflación, que está incontrolable, es consecuencia de las malas políticas del gobierno federal que no ha emprendido acciones para frenarla y conseguir un mejor nivel de vida para sus gobernados, toda vez que, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el último año el Índice de Precios al Productor han superado incluso el 12 por ciento en algunos sectores.

No podemos ignorar el informe del Inegi que expone que el costo de producción en la industria alimentaria incrementó en un 12.13%; en la Industria de bebidas y del Tabaco aumentó 10.06 por ciento; en la Industria del papel fue de 12.29 por ciento; y de un 10.37 por ciento en los servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas.

“Y somos los que menos tenemos, los de la clases media y baja, los que habitan las colonias populares, los que del diario enfrentan problemas para adquirir el dinero para comprar el alimento para la familia, los que sufrimos el aumento de esa inflación, pues cada día nuestro dinero vale muchos menos y no alcanza”, sentenció.

Para tener una idea de lo mucho que han subido los precios, basta con ir a los mercados, a los puntos de venta y adquirir, por ejemplo, pollo, naranja, tortilla de maíz, aguacate, pepinos, tomate, chile, para constatar que paga adquirir lo que siempre se compra ahora se tiene que desembolsar una mayor cantidad de dinero, concluyó.