Fabricantes y comerciantes en espera de recuperar ventas de uniformes escolares

Durante un recorrido por algunas tiendas de uniformes escolares, las propietarias, coincidieron al manifestar que desde que se presentó la pandemia en marzo del 2020, las ventas de uniformes fueron cayendo considerablemente al grado de ya no poder vender una sola pieza. Desde que el gobierno determinó que las clases se llevaran a cabo desde el hogar, los estudiantes dejaron de ir a las escuelas y dejaron de usar los uniformes.

La pandemia de Covid-19 provocó serios estragos económicos en muchos sectores. En el caso de los fabricantes y comerciantes de uniformes escolares, registraron una caída del cien por ciento en la elaboración y venta de estas prendas, por lo que muchos tuvieron que dedicarse a otras actividades. Ahora para el ciclo escolar 2023-2024, esperan poder recuperar algo de las ventas. Los padres de familia ya comenzaron a comprar.

Al realizar el recorrido por las tiendas Nena y Guille, los anaqueles tenían decenas de uniformes que ya no pudieron vender luego de que se presentó la pandemia. Ahora están con la esperanza de poder comercializarlos a pesar de que el gobierno del estado haga entrega de los uniformes gratuitos.

Irma Bernadac, propietaria de la tienda Uniformes Guille, recordó que antes de la pandemia, las ventas que registraba en la temporada alta, es decir los meses de julio, agosto y parte de septiembre, podía vender hasta ocho mil pesos diarios y ya en los meses siguientes las ventas eran de 500 y hasta mil pesos. Manifestó que tiene esperanza de que se reactive la elaboración de uniformes escolares.

Los padres de familia ya están acudiendo a comprar algunos uniformes porque el gobierno estatal solo les entregara el uniforme deportivo, y en algunas escuelas les exigen el uniforme de gala.

“Sería muy importante que los nuevos directores de escuelas primarias y secundarias no vayan a cambiar los colores y diseños de los uniformes que venían utilizando antes de la pandemia, para así de esa manera los que tenemos tiempo fabricando y vendiendo uniformes escolares los podamos vender lo que tenemos almacenados.” Destacó.

Recalcó que han tratado de mantener los precios bajos, es decir un papá va a tener que gastar un promedio de 500 pesos por hijo que estudie en nivel básico o secundaria.