Opinión: El México de 98 millones de pobres
Boltvinik, una de las voces más connotadas sobre el estudio de la pobreza, dice que no es defendible la política social de AMLO
Julio Boltvinik es uno de los académicos más sólidos en México, en el ámbito de la medición de la pobreza. Recientemente, con mi colega periodista, Jesús Anaya platicó con motivo de su más reciente libro presentado en El Colegio de México. Hago algunas anotaciones sobre sus declaraciones que me parecen muy relevantes.
El destacado académico explicó que todos los que miden la pobreza se basan en la Encuesta Nacional de Ingresos y gastos de los hogares que levanta el INEGI, dado a conocer hace ya CONEVAL lo ubique como como un un tercio de la población mexicana en condiciones de pobreza.
Un método que no sirve
El estudioso afirma que se puede dejar a un lado los datos oficiales y verificar de manera directa cómo las grandes urbes como la Ciudad de México -una de las áreas menos pobres- nos muestra que la gran mayoría de la población se encuentra en esta condición. Este razonamiento no es nuevo, Boltvinik lo puso desde el año 2000 cuando el CONEVAL dio a conocer su método de medición y desde entonces ha dicho que no sirve. Con evidencia en mano, asegura que sexenio tras sexenio, vía el CONEVAL, se minimiza la pobreza, que se obliga al CONEVAL a que registre a los niveles de pobreza en menos del 50 por ciento, con un espejismo que deriva de la intersección de los conjuntos, una operación matemática. Lo que hizo CONEVAL, es que todos los que están debajo del ingreso, pero no están en tal o cual intersección, no son pobres y todos los que tienen carencias sociales tampoco lo están. No obstante, el debate sobre los cambios en los indicadores es real, pues él destaca que todos los métodos bajan incluido el suyo, pero no es de 2 por ciento ni 8 por ciento, como en el del CONEVAL.
Programas de AMLO no llegan a los mas pobres
Otro aspecto muy destacado de esta intervención es que, por primera vez en la historia del país, los programas sociales están llegando a los más ricos desde que empezó la 4T, de 2018 a 2022. Antes, los programas sociales de transferencias -los que brindan dinero directamente a la población- llegaban a los más pobres, pero a partir del 2020 y 2022, con la 4T, sobre todo con la pensión de adultos mayores, ya no acurre así.
El académico afirma que los programas de Bienestar están llegando al decil más alto, pues los adultos mayores viven en hogares del decil 10, 9 u 8, no viven en el en el 1, en el 2, en el 3, en estos indicadores la mayor parte de la población son los niños, cuya atención no está contemplada en los programas de bienestar. Afirma que, si hubieran hecho un programa universal de protección a los niños, entonces sí los programas sociales hubieran reducido la pobreza. Sostiene también que el 70 por ciento del gasto total en transferencias se ha dedicado al programa de pensión alimentaria de adultos mayores.
Se sigue aumentando la desigualdad
Una vez que los programas sociales están llegando no a los más pobres, éstos siguen aumentando la desigualdad en la distribución del ingreso. Afortunadamente no pesan mucho, pero a la pregunta ¿A qué se debe la caída de la pobreza?
El investigador de El Colegio de México responde que por los salarios y por el dinamismo económico que se mantuvo en el sector rural pese a la pandemia. La economía rural de México no cayó en 2020 y volvió a crecer, creció en los 2 años de la 4T, porque no se cerraron las actividades por la pandemia, eran actividades al aire libre y las ciudades no se podían quedar sin alimentos o en los negocios. Y entonces hubo una caída del ingreso muy fuerte a 2020 y se recuperó, relativamente rápido para el 2022.
Destaca que los programas sociales de la 4T pasarán a la historia como transferencias regresivas, es decir, cuando la distribución de las transferencias monetarias de los programas brinda oportunidades a otros sectores para los que no están diseñados. Además, advierte, de continuar con una política social como la que ha impulsado el presidente, Andrés Manuel López Obrador, “México requiere 125 años en eliminar la pobreza en el país, ese es el ritmo de combate a la pobreza que ofrece la 4T, eso es primero los pobres y es un resultado no buscado, es un resultado donde la economía se les ha movido bien, casi por casualidad, pero no, no es cierto que los programas sociales sean lo más defendible en el presente sexenio” afirmó.