Migración forzada de chiapanecos a Guatemala es histórica
Continúan refugiados cientos de connacionales mexicanos en el país vecino del sur, aún no quieren regresar a sus hogares por miedo
Por Ricardo López
La migración forzada de Chiapas a Guatemala que se está viviendo en los últimos días es histórica, y está siendo empujada por la violencia que están ejerciendo cárteles mexicanos de la droga por el control de los territorios en la zona fronteriza.
Desde hace más de una semana, el 24 de julio, se vivió el primer éxodo de habitantes de comunidades del municipio de Amatenago de la Frontera hacia Cuilco en el departamento de Huehuetenango, Guatemala, éstos huían de las balas, huían por sus vidas.
De acuerdo a cifras de diversos medios de comunicación, se trató de al menos 600 personas quienes se refugiaron en el vecino país de sur ante la inseguridad que se vive en la región chiapaneca, en donde principalmente estaban reclutando jóvenes para utilizarlos como “carne de cañón”.
Por su parte, el Gobierno de Guatemala ante esa situación implementó un operativo llamado, “Cinturón de fuego”, en su línea divisoria para proteger su territorio y en apoyo de los chiapanecos para salvarguardar su integridad, esto con las fuerzas especiales y los “kaibiles” del ejército de Guatemala. Los militares instalaron barricadas y se atrincheraron para vigilar las montañas de la Sierra Mariscal de Chiapas.
Cabe mencionar que ante la adversidad, pobladores de Huehuetenango, principalmente las mujeres, se organizaron y han estado ayudando a los connacionales mexicanos con alimentos y apoyo moral para que no se sientan solos, ante la minimización del gobierno mexicano por esta situación de violencia que está afectando a varios municipios de Chiapas.
Asimismo, en otros puntos como en Ampliación Nueva Reforma, el Gobierno de Guatemala instaló otro albergue y ahí se encuentran al menos 200 migrantes mexicanos que están en calidad de refugiados recibiendo atención.
Pese a que los gobiernos de ambos países señalan que están ayudando con los trámites para el regreso de los chiapanecos, lo cierto es que aún cientos de mujeres, hombres, niños y niñas, siguen en territorio guatemalteco y no quieren regresar a sus hogares por miedo, ante lo cual han alzado la voz y piden que el gobierno de México les garantice las condiciones de seguridad necesarias ante la ola de violencia que impera, desatado principalmente por la violencia criminal.