La Guerra entre Rusia y Ucrania terminará hasta que EEUU lo decida: especialistas

A casi un año del inicio de la Guerra ruso-ucraniana, el conflicto armado está lejos de terminar e incluso está cobrando tintes de una posible Guerra Mundial, con la inminente inyección de cazabombarderos, tanques y armas por parte de Berlín y Washington a Ucrania, y el respaldo de aliados latinoamericanos a Rusia, apuntaron Rainer Matos Franco, autor de la ‘Historia Mínima de Rusia’ y  de ‘Limbos Rojizos’, y Nydia Egremy Pinto, editora y analista de temas internacionales, en debate para Lo marginal en el centro, de Canal 6Tv.

Al ser cuestionados por Aquiles Celis, el moderador, sobre el papel que han desempeñado otras naciones en este conflicto armado que, desde hace meses, dejó de ser solo una disputa por territorio y se convirtió en una convergencia de diversos intereses, el doctorando Matos Franco aseguró que la guerra no tendrá fin hasta que Estados Unidos lo establezca.

Destacó que, la respuesta a la duración prolongada de un conflicto que, imprudentemente se creía duraría poco, está en la intervención de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Francia, Noruega y la Organización del Tratatado del Atlántico Norte (OTAN), y por otra parte, el apoyo (abierto) de Bielorrusia, Corea del Norte, Siria, Eritrea, Cuba, Venezuela y Nicaragua a Rusia.

Resaltó también que, si bien el gobierno estadounidense ha dotado de armamento a Ucrania, la verdadera “carne de cañón” en esta guerra es el ejercito ucraniano, que carece de experiencia en conflictos armados prolongados. Asimismo, recordó que en una guerra no hay bandos buenos ni malos, pues es la población, tanto rusa como ucraniana la que paga por el conflicto de intereses.

Por su parte, la investigadora Nydia Egremy resaltó las consecuencias que esta guerra ha provocado en todo el mundo, desde una serie de protestas en Alemania, una ola de refugiados, severas afectaciones a la economía global, el incremento del costo de los combustibles fósiles y comunicaciones comerciales afectadas, ante un nuevo orden mundial en el que prevalece el “capitalismo armamentista”.

Finalmente, ambos especialistas coincidieron en que la guerra se prolongará por meses, incluso años, con la posibilidad abierta de que, a medida que pase el tiempo más países decidan involucrarse ya no solo como espectadores o destinando recursos económicos y físicos, sino colaborando altivamente para alguno de los dos bandos, dando paso a un nuevo capitulo oscuro en la historia mundial.