Hamas, Fatah y grupos palestinos acuerdan en Beijing un gobierno de unidad

Hamas, Fatah y grupos palestinos acuerdan en Beijing un gobierno de unidad

Representantes de distintas facciones de Palestina firmaron la Declaración de Beijing tras sostener una reunión en la capital china con el propósito de impulsar la reconciliación palestina. 

El ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, participó en la citada reunión. En la mañana del 23 de julio tuvo lugar en Beijing una ceremonia de clausura de la reunión.

Los principales elementos de la Declaración de Beijing incluyen el compromiso de "poner fin a la división de la nación palestina" y unir a todo el país para resistir la agresión de Israel y poner fin al genocidio.

Las partes supervisarán la aplicación de los términos del acuerdo con la asistencia de Egipto, Argelia, China y Rusia; Poniendo de relieve el compromiso con el establecimiento de un Estado de Palestina independiente con Al-Quds Al-Sharif (Jerusalén) como su capital y su aplicación de conformidad con las resoluciones internacionales pertinentes, así como el derecho del pueblo palestino a resistir y poner fin a la ocupación de conformidad con el derecho internacional, la Carta de las Naciones Unidas y el derecho de todos los pueblos a la libre determinación.

Además, acuerda formar un gobierno provisional de unidad nacional, con la aprobación de las facciones palestinas y del Presidente de la Autoridad Palestina, que ejercerá autoridad en "todos los territorios palestinos", incluidos la Ribera Occidental de Jordania, Al-Quds Al-Sharif y la Franja de Gaza, para poner fin a años de división.

Acordó también poner en marcha el Marco Unificado de Liderazgo Provisional y asegurar su congreso ordinario en un esfuerzo por levantar "el brutal asedio impuesto al pueblo palestino en Gaza y Cisjordania y proporcionar asistencia humanitaria y médica sin restricciones".

"Se enfrentará a la conspiración de los ocupantes israelíes y a su continua agresión contra la mezquita de Al-Aqsa y resistirá cualquier daño a la Mezquita, a Al-Quds Al-Sharif y a Tierra Santa".

La Declaración acogió con beneplácito "la opinión de la Corte Internacional de Justicia que confirma la ilegalidad de la existencia, la ocupación y el asentamiento".