Crisis de inseguridad golpea al Estado de México

Crisis de inseguridad golpea al Estado de México

Toluca, Estado de México.- La inseguridad en la capital mexiquense, y en gran parte del Estado de México, se ha convertido en un problema fuera de control que afecta diariamente a miles de ciudadanos que son víctimas de asaltos, robos, extorsiones y otros delitos de alto impacto.

Un ejemplo reciente fue el de un joven de 24 años que fue asesinado durante un asalto en la delegación de Santa Ana Tlapaltitlán, en Toluca. El joven se encontraba dentro de su vehículo, en la calle 2 de abril, cuando fue interceptado por sujetos armados y encapuchados, quienes lo despojaron de sus pertenencias y le arrebataron la vida. Este hecho refleja la gravedad del problema y la urgencia de respuestas efectivas.

Casos como este se repiten día a día en todo el Estado de México sin que existan acciones firmes para frenar la violencia. La población señala que la inseguridad no solo lastima a las familias, sino que “también exhibe la incapacidad de los gobiernos para garantizar la paz y la protección de los ciudadanos”.

De acuerdo con datos recientes de la Encuesta Nacional de Seguridad Urbana (ENSU) del Inegi, la percepción de inseguridad entre la población mexiquense continúa en aumento. Municipios como Chimalhuacán reportan que más del 86 por ciento de sus habitantes se sienten inseguros, o sea, 8 de cada 10 habitantes viven con temor. En Toluca la cifra alcanza el 76.1, en Cuautitlán Izcalli el 83.2 y en Naucalpan de Juárez el 82.4. Ecatepec es considerado uno de los puntos más críticos, mantiene niveles superiores al 87 por ciento, lo que refleja un deterioro constante en la confianza ciudadana hacia las autoridades y sus estrategias de seguridad.

 La propia ciudadanía señala que: asaltos en transporte público, robo a transeúnte, extorsiones y homicidios “han vuelto a ser parte del día a día, generando miedo e incertidumbre al salir a trabajar, estudiar o realizar actividades cotidianas”. Este panorama confirma que la violencia y la criminalidad se han convertido en uno de los problemas más graves que enfrenta el Estado de México, donde la percepción social va a la par de un repunte en las cifras oficiales de hechos delictivos.