Con el XX Congreso del PCCh, China busca avanzar a la consolidación de un país socialista moderno

Beijing.- Desde 2003 hasta mediados de este siglo, China se ha convertido en un país próspero, democrático, civilizado, armonioso, hermoso y moderno, sin embargo, los próximos cinco años son el período clave para iniciar la construcción de un país socialista moderno afirmó el secretario general del Partido Comunista Chino, el presidente Xi Jinping, durante la apertura del XX Congreso Nacional del Partido Comunista (PCCh), en el Salón del Pueblo, en Pekín. En su discurso, afirmó que la clave para alcanzar esta aspiración es el partido que buscará promover de manera integral el gran rejuvenecimiento de la nación, con diversas medidas entre ellas una política exterior que rechaza la injerencia extranjera en la política interna, defiende el multilateralismo y apuesta por una vigorosa economía de mercado para seguir mejorando su sistema de distribución de ingresos.

El evento ocurre cada cinco años en el Gran Salón del Pueblo, al frente de la plaza de Tiananmén, el punto de reunión más importante del Gigante Asiático, la sede de este histórico evento que marca el inicio de los trabajos del XX Congreso del PCCh. Los ojos del mundo están puestos sobre el desarrollo de esta importante reunión por la naturaleza de sus resoluciones. Se reconoció como avances haber completado la tarea histórica de erradicar la pobreza y construir una sociedad acomodada de manera integral, y lograr el primer objetivo de lucha en el siglo XXI, además, un aumento histórico en su fortaleza económica. “Esta es la victoria histórica que el Partido Comunista de China y el pueblo chino han ganado en la lucha unida, la victoria histórica que es impresionante en la historia del desarrollo de la nación, y la victoria histórica que tiene una profunda influencia en el mundo”, puntualizó Xi Jinping al entregar el informe al 20 Congreso del PCCh.

En su discurso, el presidente Xi Jinping afirmó que la clave para construir de manera integral un país socialista moderno y promover de manera integral el gran rejuvenecimiento de la nación china radica en el partido y hacia ello apunta en los próximos 5 años.  “Como el partido gobernante marxista más grande del mundo, para ganar siempre el apoyo del pueblo y consolidar su posición gobernante a largo plazo, nuestro partido siempre debe mantener su sobriedad y firmeza en la resolución de problemas difíciles exclusivos de los grandes partidos” dijo en su exposición al referirse sobre las tareas históricas del PCCh, en donde el autogobierno completo y riguroso, seguirá siendo un esfuerzo incesante.

Indicó que el partido debe tener en cuenta que la gestión integral y estricta de éste siempre estará en el camino, “la autorrevolución del partido siempre estará en el camino, y no debe haber sensación de aflojar y estar cansado de la lucha; debe promover persistentemente la gestión integral y estricta, promover profundamente el nuevo gran proyecto de construcción del partido en la nueva era y liderar la revolución social con su autorrevolución” acotó. Esto es relevante si se tiene en cuenta que el PCCh también mantiene una lucha contra la corrupción, el cual también tuvo en este periodo una victoria abrumadora, enfatizó el secretario general.

Sostuvo que se adhieren al sistema fundamental de la posición rectora del marxismo en el campo ideológico, al servicio del pueblo y del socialismo, tomando como guía “los valores socialistas básicos, desarrollar la cultura socialista avanzada, llevar adelante la cultura revolucionaria, heredar la excelente cultura tradicional y satisfacer las crecientes necesidades espirituales y culturales del pueblo”. Sin embargo, los avances deben verse también en consolidar la base ideológica común de la unidad y la lucha de todo el partido y el pueblo de todos los grupos étnicos, así como una mejora constante del poder blando de la cultura nacional y la influencia de la cultura del país.

Como  legado del PCCh y su influencia en las fuerzas políticas, Xi Jinping destacó que la práctica no tiene límites, y la innovación teórica tampoco, por lo que “la solemne responsabilidad histórica de los comunistas chinos contemporáneos es componer continuamente un nuevo capítulo sobre la modernización del marxismo en China”, por ello, llamó a sus compatriotas a seguir promoviendo la innovación teórica basada en la práctica, en primer lugar, “comprendiendo la visión del mundo y la metodología del pensamiento socialista con características chinas en la nueva era, y persistir en el buen uso de los métodos de punto de vista de posición”, como un mensaje sobre la vitalidad de la que goza esta alternativa política al poner en el centro una democracia popular, “la democracia en su forma más amplia, más genuina y efectiva”.

Respecto a temas candentes como la situación de la región de Taiwán, Xi Jinping también fue enfático: “La solución de la cuestión de Taiwán es asunto de los propios chinos, que deben decidir. Seguimos esforzándonos por lograr la reunificación pacífica con la máxima sinceridad y esfuerzo, pero nunca nos comprometemos a renunciar al uso de la fuerza y a mantener la opción de adoptar todas las medidas necesarias contra la injerencia de fuerzas externas y contra un pequeño número de separatistas de la "independencia de Taiwán" y sus actividades secesionistas, y no contra un gran número de compatriotas de Taiwán” aseveró. Indicó que tras este hecho existe un proceso histórico que no será frenado, con miras al rejuvenecimiento nacional, por ello seguirán oponiéndose firmemente a los procesos separatistas en esa región. En ese sentido, no debe haber dudas sobre el compromiso de salvaguardar la seguridad nacional y la estabilidad social.

En materia de desarrollo económico, Xi indicó que siguen firmes en construir un sistema socialista de economía de mercado de alto nivel, buscando perfeccionar el sistema económico socialista básico, consolidar y desarrollar la economía de propiedad pública “sin vacilación, alentar, apoyar y orientar el desarrollo de la economía no pública sin vacilación, dar pleno juego al papel decisivo del mercado en la asignación de recursos y desempeñar mejor el papel del Gobierno”, en el proceso de reforma y apertura que fue el punto de partida de la vigorosa economía nacional.

Para construir un sistema industrial moderno, se centrarán en la economía real, promoviendo la industrialización de nuevo tipo y “acelerar la construcción de una potencia manufacturera, aeroespacial, de transporte, una potencia de red y digital” son los retos por delante en el aspecto económico y de producción. Al tiempo que se comprometió a que las fuentes de empleos de los chinos sigan siendo parte de las preocupaciones domésticas, Xi Jinping sostuvo que China mantendrá un patrón económico internacional pluralista, estable y abiertas relaciones económicas y comerciales. También en seguir mejorando el sistema de distribución de ingresos, manteniendo el esquema de revitalización de las zonas rurales y profundizando el combate a la pobreza.

Beijing, epicentro político

Desde hace dos semanas y media, la movilidad en el centro de Pekín convive con las medidas de seguridad adicionales para garantizar la recepción de los delegados y la prensa extranjera acreditada para dar cobertura a esta reunión. Los estrictos controles de seguridad y la logística rigurosa comenzaron desde la celebración del Día Nacional, el 1 de octubre, y se extendieron hasta este domingo 16 de octubre, cuando comenzó al XX Congreso, sin embargo, el primer cuadro de la ciudad puede seguir siendo disfrutada por sus ciudadanos.

En varios puntos de la capital se extendieron carteles rojos con letras amarillas sobre puentes vehiculares citando frases del presidente Xi Jinping y contando los logros de la última década, además de la apertura de un Museo de los Avances, un espacio de 30 mil metros cuadrados para recapitular todos los logros en terrenos como el militar y productivo, con el desarrollo de maquinaria especializada, entre otros campos.

El partido cuenta con más de 95 millones de miembros. Para este congreso fueron elegidos2.296 delegados de 38 unidades electorales del país, que representan a municipios, provincias e instituciones financieras, científicas, militares, entre otros. Ellos elegirán al nuevo Comité Central—que en la actualidad tiene 199 miembros y 159 miembros suplentes—, y es el encargado de tomar las decisiones relevantes en cuanto al funcionamiento del PCCh y la administración estatal.

El Comité Central, a su vez, elegirá al Buró Político, conformado por los 25 máximos dirigentes del partido. Sus deliberaciones guían el curso del gobierno para los próximos cinco años. Ese

selecto grupo escogerá entre sus miembros al Comité Permanente, conformado por el

Secretario General y otros altos miembros del partido. En la actualidad hay siete personas

—incluido Xi Jinping y el premier Li Keqiang— pero el número puede variar según las resoluciones del Congreso.

Un espaldarazo a la gestión del presidente Xi en la estructura del partido se conoce con el informe que presenta el Comité Central saliente, que tuvo su última sesión plenaria esta semana y consideró “por unanimidad que el quinquenio que ha pasado ha sido sumamente excepcional y extraordinario”, según se lee en un comunicado. “La determinación de Xi Jinping revista un significado decisivo para el desarrollo de la causa del PCCh y el país en la nueva era, y para el impulso del proceso histórico de la gran revitalizaciónde la nación”, señala.

El documento fue presentado finalmente a la plenaria del XX Congreso, el cual admitió previamente los desafíos. “El país ha llevado a cabo resueltamente importantes luchas contra el separatismo y la intervención extranjera, ha abordado adecuadamente los riesgos y desafíos planteados por la crisis en Ucrania, se ha esforzado por mantener un entorno económico estable y saludable y un entorno político y honrado”. Respecto al funcionamiento del esquema un país, dos sistemas: “Con arreglo a la Constitución y las leyes fundamentales, se ha hecho efectivo el ejercicio del poder administrativo sobre las regiones administrativas especiales, y se ha reafirmado el principio de ‘una sola China’ y el consenso de 1992, demostrando nuestra firme determinación y poderosa capacidad de salvaguardar la soberanía y la integridad del país y de oponerse a la ‘independencia de Taiwán”.

El tablero geopolítico

Hay tres temas que llaman la atención de varios sectores en el mundo por la posición del Partido Comunista en su congreso, estos son la situación en Ucrania, la relación con Estados Unidos y la situación de Taiwán, sin embargo, el presidente Xi Jinping fue claro sobre el contexto internacional sin particularizarlos. En ese sentido, sostuvo que abogarán por un multilateralismo genuino, nunca buscará la hegemonía ni se involucrará en el expansionismo, como los pilares de la política externa y la diplomacia en los siguientes años.

“Promovemos la construcción de una comunidad de destino común para la humanidad, defendemos firmemente la equidad y la justicia internacionales, abogamos por el multilateralismo genuino, nos oponemos claramente a todo hegemonismo y política de poder, y nos oponemos firmemente a todo unilateralismo, proteccionismo y hegemonía” dijo, al tiempo que argumentó el ejemplo práctico ya seguido por el país al promover la construcción de nuevas relaciones internacionales. Actualmente participan activamente en la reforma y construcción del sistema de gobernanza mundial, realizando una cooperación internacional amplia para combatir la epidemia de coronavirus e iniciativas económicas de gran calado como la Franja y la ruta y de seguridad global, así como el cuidado del medio ambiente.

En ese sentido, afirmó que China se ha convertido en el principal socio comercial de más de 140 países y regiones, el comercio total de bienes ocupa el primer lugar en el mundo, la atracción de capital extranjero y la inversión extranjera ocupan el primer lugar en el mundo-además de estar garantizada su operación por la ley- y forman un patrón de apertura más amplio y más profundo, como un mensaje sobre la necesidad de este multilateralismo incluso para la estabilidad financiera global.

Los trabajos del XX Congreso del PCCh se desarrollarán a lo largo de esta semana en el Salón del Pueblo con diversos temas en su agenda, entre ellos, reforma a los estatutos del partido, entre otros aspectos cruciales del máximo órgano de dirección del Gigante Asiático. La preparación y expectativa para el nuevo congreso ha sido de gran magnitud. El mandatario Xi Jinping también es presidente de la Comisión Central Militar y podría ser reelegido como secretario general del PCCh, un puesto clave para el socialismo con características chinas que se ha vigorizado en la última década y mantiene gran vitalidad.