L12. Un año de impunidad y negligencia

Por: Abigail Cruz Guzmán

L12. Un año de impunidad y negligencia

El tres de mayo de 2021, 10 minutos antes de las 11 de la noche, la muerte alcanzó a 26 personas y otras 98 resultaron lesionadas cuando viajaban en la Línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo (SCT-Metro). A un año de esa tragedia, las familias afectadas no han sido atendidas adecuadamente y ninguno de los tres jefes de Gobierno de la Ciudad de México (CDMX) involucrados por negligencia en ese hecho –Marcelo Ebrard, Miguel Ángel Mancera y Claudia Sheinbaum– ha sido cuestionado legalmente.

Hasta ahora, la población de las alcaldías Tláhuac e Iztapalapa, ubicadas en la región oriente de la CDMX, siguen desplazándose en unidades de la Ruta de Transporte Público (RTP), lo que ocasiona severos congestionamientos viales; muchos de los usuarios que sobrevivieron al accidente perdieron la movilidad de manos o piernas, sienten miedo de salir a las calles o padecen otros daños psicológicos sin que el gobierno capitalino les proporcione medicamentos ni las terapias necesarias. Fueron una burla las indemnizaciones que éste dio a los familiares de las víctimas.

Los responsables de ese accidente han gozado, además, de “una impunidad absoluta; más allá de que no se pueda resarcir el daño a los familiares de las víctimas, hasta el momento no hay responsables y no ha habido una reparación que ponga en uso o en marcha nuevamente a la Línea 12”, afirmó el diputado local del Partido Acción Nacional (PAN), Héctor Barrera Marmolejo.

El también presidente de la Comisión de Protección Civil y Gestión Integral de Riesgo del Congreso de la Ciudad de México (CCDMX) reveló que el colapso de un tramo del paso elevado entre las estaciones Olivos y Tezonco de la Línea 12 del Metro “es un suceso que va a marcar a esta administración que encabeza Claudia Sheinbaum como una administración negligente y con falta de probidad para brindar seguridad y prevención a los capitalinos”.

En entrevista con buzos, el legislador panista sostuvo que la llamada Línea Dorada, que se proyectó para ampliar la movilidad de las personas en la región suroeste de la capital durante la jefatura de gobierno del ahora Secretario de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard Casaubón; tiene hundimientos y fracturas en otras áreas de su recorrido y varias estaciones; por esto resulta necesario que las autoridades locales sean “muy responsables” en los trabajos de rehabilitación de esa ruta del tren.

“A un año del suceso, esperaríamos que altos funcionarios estuvieran detenidos; que todos y cada uno de los familiares de las personas fallecidas estuvieran resarcidas en sus daños y en sus faltas, que hubiera una información transparente para todos los capitalinos y se conociera la verdad y que la Línea 12 estuviera funcionando. Pero eso no ha ocurrido a 12 meses de ese lamentable accidente”, enfatizó Barrera Marmolejo.

Jorge Gaviño, exdirector del Sistema de Transporte Colectivo Metro, reconoció que la Línea 12 fue mal calculada. “Los dictámenes que yo he leído primero tuvieron una situación de que el proyecto de la Línea 12 se fue elaborando en el camino y que tuvo problemas, entre ellos que no estuvo bien calculado, no tiene redundancia, desde el punto tecnológico; no tuvo redundancia, es decir que no tiene la fortaleza que debe tener una obra pública. Entonces lo que se descubrió y que ya vieron en los planos originales, es que le estaba faltando estructura y es lo que van a hacer, que la estructura la van a poner por fuera”, explicó el también diputado local del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Responsables sin castigo

Hasta el momento, la exdirectora del Metro, Florencia Serranía, no ha tenido que rendir cuentas por lo sucedido; y es injusto que el gobierno capitalino no castigue a los responsables de primer nivel, denunció a su vez el presidente del PAN en la CDMX, Andrés Atayde Rubiolo.

En este mismo sentido se pronunció el legislador Héctor Barrera, quien advirtió que Florencia Serranía ya había sido directora general del STC-Metro y conocía ampliamente los problemas que padecía esa Línea, entre ellos que pudiera registrarse un accidente como el ocurrido hace un año.

“Me parece que el gobierno de la CDMX le ha apostado al olvido. No hay responsables, no sabemos cómo va el proceso. Sabemos que las familias de las víctimas no han sido atendidas como debe ser. Es decir, que de lo que sucedió ese día no hay resultados como tampoco se han visto avances”, añadió Atayde.

El diputado destacó que los habitantes que diariamente utilizaban esa línea para ir a su trabajo, llevar a la escuela a sus hijos o trasladarse a cualquier parte de la capital, consideran que la Línea 12 no tiene compostura y que tampoco hay solución para sus necesidades de transporte, además de que viven en la incertidumbre, al no saber si una vez rehabilitada quedará libre de accidentes.

Sin embargo, Atayde mencionó que lo ocurrido hace 12 meses en las estaciones Olivos y Tezonco fue consecuencia de una serie de problemas suscitados previamente en el STC-Metro, por lo que la exdirectora Serranía debe ser llamada a cuentas. “Recordemos que hubo muertes, accidentes, explosiones, y todo esto ha ocurrido en esta administración; y también fue bajo la administración de Serranía”, recordó.

El político refirió que trabajadores del Metro, en lo individual y a través de los sindicatos del STC, han declarado ante organizaciones de la sociedad civil que tanto el Gobierno Federal como el de la CDMX “les vienen fallando”.

La titular de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), Ernestina Godoy, ha estado más ocupada en inventar y fabricar delitos contra Alejandra Cuevas –la hija de la cuñada del Fiscal General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero– que en investigar y procesar a quienes deben responder por el fallecimiento de las 26 víctimas del accidente del tres de mayo en la Línea 12 del Metro, comentó Federico Döring, diputado local del blanquiazul; y agregó que los trabajos de reconstrucción de la Línea Dorada son lentos porque no los hace el gobierno, sino que los está realizando el empresario Carlos Slim: “Todo va muy lento porque todo lo hace Carlos Slim, no lo hace el gobierno, van al ritmo de Slim, es dinero de Slim. Tenemos un gobierno que evadió su responsabilidad y la solución viene del Grupo Carso y entonces, Carso pone las condiciones, Carso pone el ritmo y Carso pone el dinero, el gobierno es solo una maceta de adorno”, apuntó.

Falla estructural de origen 

Después de que el gobierno de la CDMX emitió, hasta el siete de septiembre, el dictamen de la empresa internacional DNV sobre las causas de lo ocurrido el tres de mayo, pudo confirmarse la hipótesis de que una falla estructural provocó el colapso de una trabe entre las columnas 12 y 13, lo cual fortaleció la versión de que hubo vicios y deficiencias de origen en la obra.

La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRyPC) recibió de DNV el resultado de la investigación del accidente, que era vista como el proyecto emblemático del gobierno de Marcelo Ebrard, quien ocupó la jefatura de gobierno de la CDMX entre 2006 y 2012. En el documento de 180 páginas se describe que “los resultados del análisis indicaron que el colapso ocurrió como resultado del pandeo de las vigas norte y sur, facilitado por la falta de pernos funcionales en una longitud significativa, lo que causó que parte del tramo elevado perdiera su estructura compuesta”.

Según el documento “la estructura compuesta estaba operando como dos vigas paralelas independientes, una viga de concreto y una viga de acero, que experimentaron condiciones de carga para las que no estaban diseñadas. Lo anterior creó condiciones que llevaron a la distorsión del marco transversal central y la iniciación y propagación de grietas de fatiga que redujeron aún más la capacidad de la estructura para soportar la carga”.

También halló pernos mal soldados, mala colocación de pernos y deficiencias en las vigas, lo que propició aún más la falla estructural.

El secretario de Obras y Servicios, Jesús Antonio Esteva Medina, entregó el dictamen final al Comité Técnico Asesor para la Rehabilitación y Reforzamiento de la Línea 12 para que fuera considerado en las obras de rehabilitación.

A finales de agosto de 2021, la Jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, anunció el comienzo de los trabajos para rehabilitar la Línea 12. Se efectuaron estudios topográficos y otros análisis preliminares, lo que inició formalmente el programa para reforzar el tramo afectado.

Entonces se anunció que los trabajos durarían 12 meses y que serían costeados por las empresas que participaron en la construcción de la Línea Dorada de Marcelo Ebrard: Carso Infraestructura y Construcciones e ICA, en la obra civil; Alstom en la obra electromecánica y CAF en lo referente a los trenes férreos.

En septiembre se firmó un convenio de colaboración entre el gobierno de la CDMX y las empresas sobre la obra y sus alcances. El Comité Técnico Asesor enunció que la reconstrucción se haría con base en tres vigas metálicas tipo cajón y sistema de piso prefabricado y que era necesario el análisis del reforzamiento o sustitución del tramo gemelo. En este punto se realizaría también la rehabilitación integral del sistema de vías, señalización, catenaria e instalaciones eléctricas y electrónicas.

Se reveló que el resto del viaducto elevado que no resultó dañado también sería reforzado mediante el apuntalamiento de sus tramos metálicos, con base en puntales; así como sus conexiones, nuevas cimentaciones y la instalación de topes sísmicos auxiliares.

El siete de marzo de 2022, Jesús Esteva Medina, secretario de Obras y Servicios del Gobierno de la CDMX, difundió los avances en la reconstrucción de la Línea 12, informó que el tramo derribado sería reconstruido en su totalidad y que la sección subterránea sería habilitada hasta concluir con la obra.

El funcionario resaltó que la estructura colapsada sería reconstruida en su totalidad y que se colocarían tres trabes en lugar de las dos que antes tenía. En cuanto a la sección similar, denominada “tramo gemelo o simétrico” y que se ubica a 200 metros, sería sometida al mismo proceso de reconstrucción integral por recomendación del Comité Técnico Asesor.

Esteva Medina aseguró también que la Línea 12 era sometida a una rehabilitación total para reinaugurarla sin riesgos y que por ello el túnel subterráneo que corre de la estación Mixcoac a la de Atlalilco, que no sufrió ningún daño, no operaría hasta que los trabajos de reconstrucción concluyeran.

Sheinbaum reportó que “la gran mayoría” de los costos de rehabilitación (el 95 por ciento) sería aportada por las empresas privadas y que el otro cinco por ciento sería cubierto por la administración capitalina, presupuesto asignado al margen de lo que se pagó a la empresa internacional DNV.

Guillermo Calderón, director general del STC, notificó que se han rehabilitado siete curvas del tramo subterráneo para reducir entre un 30 y un 40 por ciento los costos de mantenimiento.

Las autoridades capitalinas han informado que la Línea 12 podría operar nuevamente a finales de 2022, aunque también advirtieron que, antes de ello, habrá un periodo de pruebas para evaluar su seguridad.

Esteva Medina explicó que, a mediados de marzo, las grietas descubiertas en 116 de las 158 columnas habían sido reforzadas con fibras de carbono y rellenadas con resinas. Estos trabajos provocaron el cierre de un carril de la Avenida Tláhuac y severos congestionamientos viales en esa zona.

Víctimas abandonadas 

El abogado Teófilo Benítez Granados, defensor de 14 de las 98 personas que resultaron lesionadas en el accidente de hace un año, denunció que sus representados no han sido recibidos por la titular de la FGJCDMX, Ernestina Godoy. “La propia Fiscalía ignora a las víctimas, ellas se han presentado en diversas ocasiones ante la dependencia y no las reciben, no las atienden y solo se limitan a informarles que por el momento no pueden darles la cita, o que no llegó la persona que las iba a atender”.

Entrevistado por este semanario, Benítez Granados aseguró que las autoridades de la CDMX no les han brindado los servicios médicos requeridos, ni cubierto los gastos generados por las revisiones médicas y psicológicas que debieron efectuarse para reparar los daños sufridos en el accidente. El gobierno capitalino está obligado a pagarlos; y es urgente que lo haga porque las víctimas necesitan esos recursos.

“Claudia Sheinbaum no ha querido hacer esos peritajes e invertir. Nosotros tenemos que invertir para realizarlos, porque nosotros traemos esa representación de las víctimas; lo que necesitamos para reparar el daño es una cuantificación en la que se informe sobre los daños psicológicos, a cuánto van a ascender, a cuántas consultas o daños por lesiones y que van a ser atendidos con base en estas necesidades o que alguno de los lesionados se tiene que operar otra vez; o que a alguno se le tienen que hacer otras radiografías. Todo ello se debe cuantificar y la autoridad nunca ha querido hacer esos dictámenes para poder cuantificar los daños”, puntualizó el abogado.

Informó que de las 14 víctimas a las que representaba legalmente, dos fallecieron, 12 fueron lesionados; y entre éstos hay varios con daños severos; éste es el caso de Rigoberto, quien estuvo a punto de perder un pie y debió ser operado en dos ocasiones para salvárselo. “Todos los demás traen problemas psicológicos y algunas de las partes de su cuerpo han perdido movilidad.

“En el aspecto psicológico –abundó el abogado– tampoco les han brindado la atención médica que merecen; simplemente no les han dado nada, ni para un medicamento. Un ejemplo claro es el de la señora Adriana: ella les ha pedido que le den para sus medicamentos y la respuesta ha sido siempre negativa, que la compra de medicamentos y estudios los deberá realizar con los recursos que en un principio les dieron”.

Con respecto a las indemnizaciones, Benítez Granados afirmó que el GCDMX solo repartió un millón de pesos, lo cual “es una burla”, porque el accidente en la Línea 12 derivó de una serie de actos de corrupción.

El abogado aseveró que primero debió anunciarse el acuerdo de reparación integral del daño a las personas afectadas y luego proceder a la rehabilitación de la obra. “Lo importante de todo este acuerdo tienen que ser los lesionados, antes de la reparación material debe ser la reparación integral a víctimas”, comentó.

El también integrante del despacho jurídico BEARRS reveló que ahora está en estudio la carpeta de investigación; pero una vez concluido el análisis, evaluarán la posibilidad de presentar los recursos legales para ampliar la imputación de los delitos de homicidio, lesiones y daños –todos dentro de la modalidad de culposo– a las personas morales, en este caso a las empresas constructoras de la Línea 12, que fueron ICA, Carso y Alstom, además de las autoridades del GCDMX relacionadas con el accidente.

Benítez destacó que está acreditado que las víctimas no han tenido ninguna ayuda de la propia jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum y otras dependencias. Además, denunció que se desconoce el paradero de los recursos de Atención a Víctimas, los cuales ascienden a más de un millón de pesos.

“¿Dónde está el fondo que se creó para las víctimas? Está perdido, anda en el limbo, era más de un millón de pesos ¿En dónde está? ¿A poco ya se fueron a guardar ese dinero a la caja chica para las próximas elecciones? ¿Dónde están todos esos recursos?”, cuestionó el abogado.

Benítez Granados indicó que, hasta la fecha, se desconoce el acuerdo reparatorio que las empresas Carso Infraestructura y Construcción suscribieron con la FGJCDMX para indemnizar a las personas afectadas, como lo informó Claudia Sheinbaum el 21 de octubre del año pasado.

Finalmente, señaló que “no se va a permitir que lo que ocurrió en la Línea 12 del Metro quede impune y también haremos todo lo necesario para que se esclarezca el caso para que las autoridades no repitan los mismos tratos y se utilicen mal los recursos. Además de que no sabemos qué podrá ocurrir más adelante”.

En un recorrido realizado por buzos, pudo constatarse que las estaciones de la Línea 12, que desde hace 12 meses están cerradas, han sido vandalizadas, convertidas en basureros y son usadas como refugio de indigentes.