El verdadero pecado en la semana santa para los queretanos.
Por costumbre, sobre todo de religión, la mayoría de los mexicanos acostumbran comer pescados y mariscos en la semana santa y en el caso de Querétaro, se hace casi imposible consumir esos productos del mar en la cuaresma.
Y es que consumir este tipo de alimentos implica que se destine el equivalente a un salario mínimo que ronda en 207.44 pesos; los precios de los productos en los mercados locales en Querétaro, como el salmón rondan en 370 pesos, camarón entre 299 y 399 pesos, huachinango del golfo en 200 pesos y carpa, bagre y lobina en 100 pesos. A esto se le tiene que agregar que estos productos se les agrega verduras las cuales rondan desde los 9 pesos como el chayote hasta los 36 pesos como es el garbanzo, pasando con precios intermedios de la calabacita, coliflor, lechuga papa, tomate, zanahoria, etc.
Aunque la población trata de planear un menú, compara precio y busca las mejores alternativas, aun así resulta costoso, por lo tanto no todas las familias podrán alimentarse con este producto; más allá de la tradición en cuaresma y basado en los costos, cuatro de cada diez personas en Querétaro dedicarán un día de trabajo para poder consumir mariscos, ya que este año los precios aumentaron 9.27%.
Ante esta situación lo más recomendable es consumir carnes rojas que sus precios van desde los 124 hasta los 204 pesos el kilogramo, o lo que las autoridades recomiendan, principalmente la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), sugieren que las familias compren cierto tipo de pescado para evitar que gasten de más y proponen que se consuma el pescado lisa que en promedio tiene un precio de 40 a 70 pesos.
La población señala que su verdadero pecado en semana santa es ser pobre y tener un ingreso muy bajo, el cual no le permite destinar parte de sus ingresos para tener una mejor alimentación, no sólo en un periodo como lo es la cuaresma, sino a la largo de su vida.