BYD: De baterías en Shenzhen al liderazgo mundial en movilidad eléctrica

Lo que comenzó como una pequeña empresa en Shenzhen dedicada a fabricar baterías recargables, hoy es uno de los titanes de la revolución verde global. Fundada el 18 de noviembre de 1994, BYD (Build Your Dreams) ha recorrido un camino sorprendente, innovando sin pausa y marcando hitos clave en industrias que van desde la automotriz hasta el transporte ferroviario.
BYD debe su nombre al ideal por construir una industria que fuera eficiente, rentable, pero, al mismo tiempo, ecológica. Hoy ese sueño se ha hecho realidad y la pequeña empresa de Shenzhen ya no solo produce baterías, sino trenes elevados, taxis eléctricos y hasta plataformas de inteligencia vehicular.
Todo comenzó a mediados de los años 90, cuando Wang Chuanfu adquirió una compañía automotriz en declive, la Xi'an Qinchuan Automobile, para reconstituirla y fundar una nueva empresa innovadora. Por aquel entonces, BYD incursionó en el mercado de baterías de iones de litio, convirtiéndose, poco después, en proveedor de grandes empresas como Motorola y Nokia. La compañía no tardó en cruzar fronteras: su primera sucursal internacional se estableció en los Países Bajos para incursionar en la Bolsa de Hong Kong.
Solo una década después, en 2003, BYD lanzó al mercado el primer auto chino híbrido del plantea. Su exitoso modelo F3, el primer automóvil de BYD, rompió barreras en China al superar las diez mil unidades vendidas por mes. Pero el verdadero golpe de innovación vino con el F3DM, el primer vehículo híbrido producido en masa en el mundo, adelantándose incluso a gigantes tecnológicos como la japonesa Toyota.
Desde entonces la empresa ‘de los sueños’ se ha colocado como una de las líderes de producción de autos en el mundo. Pero no solo eso; ahora también se ha adentrado en la fabricación de autobuses eléctricos, semiconductores y sistemas de almacenamiento de energía.
Entre algunos de sus grandes éxitos se encuentran los modelos automotrices K9, el primer autobús 100 por ciento eléctrico, y el e6, modelo que formó parte de la primera flota de taxis eléctricos del mundo. Así BYD comenzó a cambiar el rostro del transporte público.
Desde aquel entonces han transcurrido más de 20 años. Actualmente, BYD se enfoca principalmente a la producción de vehículos de nueva energía y poco a poco ha ido disminuyendo su producción de automóviles de combustión interna.
Hoy, la compañía celebra hitos impresionantes: la producción del vehículo eléctrico número 10 millones, ventas anuales que superan los 4 millones de unidades, y una constante expansión de marcas y tecnologías, como Yangwang, su línea premium, o Fang Cheng Bao, con modelos personalizables.