Violencia deja en orfandad y crisis humanitaria a miles de niños y mujeres
Por Olivia Ortiz
Luego de que la directora del Centro de Defensa de Derechos Humanos “José Ma. Morelos y Pavón”, Teodomira Rosales Sierra firmará un convenio ante la Corte de Estados Unidos con la intención de frenar el tráfico de armas a México y de disminuir a mediano y largo plazo, la violencia y criminalidad que han dejado en la orfandad y en alta crisis humanitaria a miles de niñas, niños y mujeres, se reunió con familias víctimas de desplazamiento interno forzado y familias víctimas de desaparición.
La finalidad del encuentro realizado bajo el frío, la tristeza y frustración ante el abandono de la gobernadora morenista Evelyn Salgado Pineda, que ofreció que Guerrero sería el santuario de los derechos humanos, fue analizar logros y pendientes del 2024.
A la reunión asistieron hombres y mujeres indígenas nahuas de la Montaña Baja e hijos de desaparecidos, quienes manifestaron sus inquietudes, problemas y esperanza de que este año se avance en la solución de sus demandas.
Entre los pendientes, destacan que las instancias correspondientes no realizaron la búsqueda de sus familiares; no se hicieron las investigaciones para dar con los responsables de las desapariciones; que en el 2023, la CEAV estatal a cargo de Enedina Medrano quedó a deber los meses de octubre, noviembre y diciembre, igual que este 2024, por lo tanto, les deben seis meses de la canasta básica.
Asimismo, no se ha logrado igualar la cantidad que la CEAV federal otorga a las víctimas; no se ha concretado la audiencia con Anacleta López Vega, encargada de despacho de la Secretaría General de Gobierno, entre otras.
Se informó también que están articulados con colectivos de todo el estado para luchar por la aprobación de la propuesta de Ley en Materia de Desaparición Forzada de Personas del Estado de Guerrero y para que el gobierno realice la reparación del daño a familias que ya recibieron los restos de sus familiares.
Rosales Sierra destacó la falta de atención psicológica, médica, educativa, alimentaria y de empleo porque a las víctimas no llegan los apoyos sociales, acordando que saldrán a manifestarse para conquistar sus derechos y responsabilizó a la gobernadora de lo que les pueda pasar, “sólo con mirar las condiciones en que se encuentran los niños y sus madres, nos basta para seguir caminando”.
Al final, los asistentes, que recibieron despensas, ropa y juguetes, manifestaron su cariño a la directora del Centro Morelos, Teodomira Rosales Sierra, a Casiana Nava Rodríguez y a todos los integrantes del Centro de Defensa de Derechos Humanos.