En 2021 Edomex fue de las entidades con menor número de nacimientos registrados

México se encuentra en un escenario de grandes cambios con respecto a la fecundidad, de acuerdo a especialistas, se requieren más estudios para dar cuenta de las tendencias recientes, señaló el diputado local de Morena, Camilo Murillo Zavala y destacó que del millón 912 mil 178 nacimientos registrados en 2021, el Estado de México con 45.7 por ciento, es una de las entidades con la tasa más baja de natalidad y en contraparte Ecatepec fue el municipio con más nacimientos registrados.

Agregó el legislador, que de acuerdo a datos de la Estadística de Nacimientos Registrados (ENR) del INEGI, en México, durante 2021, se contabilizaron 1 millón 912 mil 178 nacimientos registrados, que significó una tasa de 55.6 nacimientos registrados por cada mil mujeres en edad reproductiva y el aumento fue de 7.7 unidades respecto al año anterior.

El Estado de México (45.7), Baja California Sur (45.5), Yucatán (43.6) y la Ciudad de México (37.4), fueron las entidades federativas con las tasas más bajas de natalidad, mientras que Chiapas (99.8), Guerrero (72.5) y Zacatecas (67.9) reportaron el mayor número de nacimientos.

El diputado de Ecatepec, destacó que en total, la ENR reportó 219 mil 399 nacimientos en ese año registrados en la entidad mexiquense.

Con 19 mil 199 nacimientos registrados, Ecatepec fue el municipio mexiquense con la más alta natalidad, seguido de Nezahualcóyotl con 13 mil 116 alumbramientos, Toluca con 12 mil 098, Chimalhuacán con 10 mil 340, Tlalnepantla de Baz con 6 mil 794 y Valle de Chalco-Solidaridad con 6 mil 280 nacimientos.

Sobre el tema, especialistas de la Universidad Latinoamericana de Ciencias Sociales indicaron que la fecundidad en México se encuentra en un momento de cambio. La información que proporciona el Censo de Población y Vivienda 2020 indica que ha seguido cayendo y que por primera vez el país registra una fecundidad por debajo del nivel del reemplazo poblacional (2.1 hijos por mujer), que es el convencionalmente considerado como indicador del reemplazo de la población en el largo plazo.

El aumento en los niveles de escolaridad de la población femenina podría llevar a que se acentúe este patrón, ya que una proporción mayor de mujeres en la educación superior (junto con políticas apropiadas de servicios de anticoncepción para las jóvenes) podría resultar en un aumento de la intensidad de primeros nacimientos alrededor de los 30 años de edad, como se ha sugerido en investigaciones previas de otros países de América Latina.