China: Agricultura cooperativa y turismo le permiten a Nangou salir de la pobreza
Yan´an.- En la franja territorial de gigantescas e históricas luchas nacionalistas contra la ocupación japonesa y la referencia obligada de los comunistas en China, como lo es Yan´an, visitamos la aldea de Nangou, una de las localidades que la República Popular China muestra como un modelo exitoso de combate a la pobreza en el ámbito rural, del modelo socialista con características chinas.
Situada en el sur del distrito de Ansai, la aldea Nangou, tiene una superficie total de 24 kilómetros cuadrados, cuenta con 345 hogares con vivienda de 1,009 personas ubicados en 7 grupos de aldeanos, entre ellos 45 hogares pobres, con un total de 119 personas, quienes habían estado inscritos en el archivo y la ficha de datos oficiales de pobreza de China.
¿Cómo salió de la pobreza la aldea de Nangou? Durante el proceso de erradicación de la pobreza, la aldea de Nangou adoptó el modelo de desarrollo dirigido por las secciones partidarias del Partido Comunista Chino, a partir del 2012.
Entre las medidas que tomaron en coordinación con las autoridades de la República popular China fue desarrollar 3,160 mu, equivalente a unas 211 hectáreas de manzanas de montaña cultivados en sistema de invernadero, mientras que 8 hogares más se dedicaron a la crianza en escala 1,200 ovejas en stock.
Se dio también gracias al impulso de al menos tres reformas que comprenden. Primero: acumular capital suficiente para comenzar con una empresa, en donde la propiedad de la tierra vence las esferas del minifundio-tan característico de la pequeña propiedad agrícola en México- y se convierte en parte del capital de una nueva empresa privada emergente. Se une a los campesinos a la actividad productiva a través de la modalidad de la cooperativa. Para mejorar su calidad de vida, los convierte en parte activa de una empresa productiva con vocación de mercado como accionistas.
De esta forma, las empresas brindan trabajo a los campesinos a lo largo del año, en las diversas etapas del ciclo agrícola, pero también los convierte en participes del rumbo que tenga la nueva empresa. Ya como nuevos participantes del mercado, se promueven el desarrollo de pequeñas cajas, lo que permite a los lugareños contar con ingresos derivados de los rendimientos del avance de la pequeña empresa en el sector rural. De ahí se explica que el trabajo del campo se vuelva un motor de la actividad de cada uno de los lugareños.
Realizadas la operación cooperativa y demostración de los miembros del partido, así como la participación de las masas, es decir, las personas de la localidad, y “a través de la consolidación de un fuerte equipo de partido, la “transformación de la mentalidad del público objetivo y la introducción de empresas líderes” lograron convertir a esta pequeña población al sur de China en un modelo exitoso de combate a la pobreza en el sector rural.
En el invernadero de manzanas de Nangou, nos recibe Zhang Cheng, uno de los campesinos, quien minutos antes nos recibió con sandías y uvas de la producción local. Asegura que los campesinos durante el mes de agosto se encuentran embolsando las manzanas para protegerlas de las inclemencias del tiempo, una temperatura superior a los 38 grados en el verano. Azadonan todos los días para garantizar la nutrición de las plantas, podan las ramas y las hojas para que los manzanos crezcan mejor. “Nosotros no buscamos la erradicación de la empresa. Nuestro objetivo es el desarrollo del pueblo” nos dice en entrevista.
La aldea, además, dispone de infraestructura integral: electricidad, agua corriente y caminos asfaltados en cada rincón, una clínica de alto grado a nivel de provincia y las viviendas a un nivel de seguridad del 100 por ciento, partiendo de que esta categoría representa haber sacado a decenas de habitantes que vivían en lo que las autoridades chinas denominan como “cuevas habitadas”, espacios en donde la gente vivía sin que representara realmente una vivienda edificada.
En 2018, la aldea erradicó la pobreza y en 2021, los ingresos disponibles per cápita alcanzaron los 17,500 yuanes derivados de la comercialización de los frutos producidos. Es decir, en 8 años, la aldea de Nangou pudo levantar la bandera blanca al sacar de la situación de pobreza a sus habitantes, el flagelo que los hermana con decenas de miles de poblaciones rurales de México, a miles de metros de distancia.
Con este giro que une la propiedad rural y al capital, Nangou muestra hoy un desarrollo vigoroso de la agricultura moderna y también da sus primeros pasos hacia el turismo, mostrando los avances de su comunidad. En la plaza principal presentan a propios y extraños que el campo en China también está permitiendo calidad de vida a quienes la trabajan. En México, la Universidad Autónoma Chapingo, la máxima Universidad Agrícola del país, reza: “Enseñar la explotación de la tierra, no la del hombre”, aquí, esa aspiración no es letra muerta bajo la estrella comunista que tanto abrazan en muros, edificios, plazas públicas y hogares, los habitantes de Nangou y de la inmensa provincia de Shaanxi.